El día a día como Tripulante Cabina de Pasajeros 

Viajar alrededor del mundo con una imagen perfecta,  uniformes de reconocidos diseñadores, hacer turismo en las principales capitales del mundo entre vuelos y formación continua  caracterizan los días de este grupo de mujeres y hombres.

Esa es la imagen que solemos tener del tripulante cabina de pasajeros. Pero no sólo es viajar, ver mundo y horas de vuelo.

Es una profesión bonita, si. Aunque también hay que ser consciente de muchos otros aspectos.

De ida y vuelta

Técnicamente como  “En tránsito permanente”. Esta frase resume lo que es el día a día de una o un tripulante de cabina de pasajeros, sin rutina fija, según la programación, con un destino diferente cada semana. Los itinerarios de vuelo cambian cada mes, sobre todo aquellos que incluyen rutas largas y con escalas, por lo que el TCP siempre está en ese constante ir y venir.

Días libres, laborables y rotaciones 

Los días laborales, en aire y tierra, se alternan con los libres.  Dependiendo de la ruta en la que se suela trabajar, estos pueden oscilar entre uno (para distancias cortas) hasta doce para rutas con el continente Asiático o América.

Las rotaciones son de mañana, tarde y noche dependiendo del vuelo en el que vayas a operar y son de 7 dias. El máximo de actividad es de 12h aunque esto puede variar dependiendo de el número de vuelos o escalas de estos. Hay un máximo de horas que no se puede exceder y se calcula cada 28 dias.

Los días libres y laborables del tripulante de cabina de pasajeros se denominan de la siguiente manera:

• Día de actividad. El día que vuelas
• Día Stand by. En principio no vueas pero, estás de suplente y te pueden llamar para volar. Hay que tener el teléfono cerca.
• Día franco. Si no te asignan vuelo hasta cierta hora, al día siguiente no se trabaja.
• Día en posición. Vas como pasajero hasta otro destino para empezar la actividad.
• Day off. Día libre de 24h.

Desgaste físico 

El cuerpo de la o el tripulante de cabina de pasajeros nota mucho el día a día de este trabajo. Las horas de descanso entre un vuelo y otro son justas y cortas. Los cambios de presión provocan hinchazones en tobillos, que te duelan las piernas o sufras hipoxia.

En rutas largas, los cambios de hemisferio y de estación y las grandes diferencias horarias acentúan el cansancio y, en ocasiones, el aturdimiento.

Se llega a los destinos trabajando y, en ocasiones, con horas acumuladas. Esto supone llegar cansado a los hoteles y quizá en 8-10h volver a estar de camino al aeropuerto para volver a empezar el día y acabar en otro destino completamente diferente al que has estado.

El Proceso de selección 

Una vez te convocan para una entrevista, es imprescindible ir debidamente vestido y con un CV actualizado.

Se pasa por diferentes fases eliminatorias, dinámicas de grupo, pruebas de inglés, role play… hasta llegar a la entrevista personal. En esta, la pregunta fija que todo candidato/a escucha es: ¿Tienes tatuajes visibles?. Prohibido llevarlos visibles.

Cuando te comunican que has pasado la entrevista, empieza un proceso de documentación largo y muy exhaustivo donde te requieren Certificado CIMA de clase II, pasaporte, visados, antecedentes penales, referencias de tus anteriores trabajos… Dependiendo de la compañía te pueden pedir más documentación y este proceso se hace un poco largo y pesado.

Hay que pasar un curso inicial llamado de “conversión” que suele durar varias semanas.  Aquí se explican los procedimientos de la compañía, política, tipo de avión, mercancías peligrosas…

Cuando acabas el curso y recibes la tarjeta de la compañía ya estás listo para empezar a “volar” como tripulante de cabina de pasajeros.

Lo más gratificante

Viajar. Ese es uno de los principales atractivos de la profesión ya que, aunque se suman horas de vuelo y riesgos considerables, se visitan lugares llenos de contrastes, repletos de sorpresas e interesantes.

Conoces gente diversa, de diferentes lugares, y culturas diferentes. Por lo tanto, esto te reporta una mayor capacidad empática y te abre la mente. ¡Viva la multiculturalidad!

Si tienes margen de horas o tu siguiente vuelo no es hasta un día después, puedes recorrerte las zonas históricas las ciudades donde te alojas las cuales serán grandes capitales como Londres, Praga, Berlín, Tokyo, Sydney… o allí donde sean tus destinos.

Ahora que conoces mejor la realidad del trabajo de Tripulante Cabina de Pasajeros…

¿Quieres formarte como TCP?

Euroaula te ofrece el curso de Tripulante de Cabina de Pasajeros (TCP), formación certificada donde aprenderás a aplicar las normas y procedimientos establecidos por la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA).

Este programa te capacita para:

• Desarrollar las operaciones previas y posteriores al vuelo.
• Desarrollar las operaciones de atención y/o asistencia a bordo en la nave.

A lo largo del desarrollo del curso, te familiarizarás con las principales funciones de un TCP como seguridad de a bordo y el servicio a los pasajeros durante un vuelo.

¡Descargate ya el catalogo y haz despegar tu futuro profesional!